Un Molinillo de Café

Miguel Monsivais
Por -
10

 



___________________________________


Hola! ¿Qué les pareció el relato de este jueves?, tengo apenas 30 años, pero siento que esa escena ya la viví, no se tal vez haya conocido a alguien en otra vida u otro tiempo, esta vez la convocatoria de este jueves viene de la mano de Nuria en su blog - Bitácora Literaria

«Te acuerdas de aquella caja de heno de Pravia llena de cromos de picar, o aquellas canicas para jugar al hoyo. O tal vez recuerdes los álbumes de cromos que sorteaban en la escuela, regalo de la casa Nocilla. O, aquel rosario, o diario que te regalaron el día de tu comunión»

Pues ahí está mi propuesta, en los OBJETOS. Pero claro, tan fácil como recordar los objetos de nuestra infancia no iba a ser. Sólo tenéis que elegir una de las imágenes y buscar vuestra inspiración. Imágenes de objetos antiguos que estoy segura que despertarán y evocarán muchos recuerdos y sensaciones al verlas. 

Recordad que vuestro relato, poema o lo que surja no debe excederse de las 350 palabras, con las excepciones que a veces el texto precisa. Se requiere que sean recíprocos con los participantes que los leen y visiten su blog para leer también los aportes de los compañeros/as Jueveros.

¡Adelante con la inspiración!

 Aquí el link directo a la convocatoria

Aquí el link de las convocatorias pasadas o por venir


Muchas gracias por leerme :)

Publicar un comentario

10Comentarios

  1. Me ha parecido muy original tu texto. No hace falta tener una edad para tener recuerdos que parezcan como muy lejanos en el tiempo.
    Un saludo, feliz jueves.

    ResponderBorrar
  2. Tu aportación es ante todo evocadora, por lo que sugieren los añosos asientos alrededor de la mesa y el aroma del café.
    Felicidades por tu aportación.
    Saludos.

    ResponderBorrar
  3. Has descrito un ambiente de serena quietud prolongada en el tiempo, propicia para saborear esa taza de café que dota a la escena de intimidad y relajación. Incluso el protagonista es un anciano, como no, sentado. Excelente ambientación para ese reto del molinillo de café.
    Un saludo.

    ResponderBorrar
  4. Me gusto mucho tu relato, la intimidad de ese ambiente con los viejos sillones, el anciano, es evocador de un tiempo, de una vida, muy bonito.
    Saludos.
    PATRICIA F.

    ResponderBorrar
  5. Muy original en cómo lo planteas. Me ha encantdo ese molinillo de café en la ambientación perfecta que logras.

    Un abrazo

    ResponderBorrar
  6. Muy original aportación. Saludos!
    lady_p

    ResponderBorrar
  7. Hola Miguel, pensé que ya te había leído y comentado el relato, pero no veo mi comentario, se me pasaría dejártelo, te vi por bloguers y lo leí, ahora estoy desde los enlaces de Nuria y al leer el tuyo me he acordado que ya lo había leído, pero bueno, no pasa nada... Recuerdas un montón de cosas de mi infancia, qué nostalgia, el molinillo era un clásico...
    Un abrazo. :)

    ResponderBorrar
  8. Se nota que eres cafetero cien por cien, porque en pocas palabras has expuesto el ambiente que le guste encontrar a la hora de degustar un café.
    Un relato estupendo.

    ResponderBorrar
  9. Hola Miguel. Tu relato nos envuelve en el aroma de esa taza de café humeante. La quietud y serenidad del anciano y sus recuerdos, seguramente sobre esa mesa de madera y la familia al rededor tomándose su taza de café, después de molerlo en el molinillo con ese olor tan especial que deja el café recién molido. Un relato nostálgico y emotivo, cuyos recuerdos pueden invadirte, tengas la edad que tengas, pero que sin duda la vejez, si es en soledad trae más a la mente y el corazón.
    Me gustó mucho.
    Un fuerte abrazo

    ResponderBorrar
  10. Mmmm...Hasta aquí llega el olorcito.
    La forma del culo de los asientos es como una reserva. nadie mas puede sentarse ahi, pero apetece hasta contemplarlo desde el exterior.
    Abrazooo

    ResponderBorrar
Publicar un comentario

#buttons=(Ok, Go it!) #days=(20)

El sitio web utiliza cookies para mejorar tu experiencia. Leer más
Ok, Go it!